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28/5/22

El monstruo en su madriguera (2 de 2)

Pedro Conde Sturla

27 mayo, 2022

Félix W. Bernardino, pistola al cinto

El nombre de Felix W. Bernardino, alias Buchilai, es algo que la gente del Este de cierta edad todavía recuerda con espanto. Mencionar a Buchilai —un apodo de carnicero— era como mencionar al diablo y verlo venir al mismo tiempo. La presencia de Buchilai en El Seibo y sus alrededores era tal vez más agobiante que la de Petán en Bonao. Es posible que —en comparación con Buchilai— para muchas personas Petán Trujillo podía parecer un angelito. Ni siquiera los Cocuyos de la Cordillera, la organización paramilitar que ideó Petán para combatir a los guerrilleros del 14 y 20 de junio tuvieron tan mala fama como los Jinetes del Este de Bernardino. Petán era por lo menos un abusador, y de seguro era capaz de matar o de mandar a matar y había matado, pero no era un asesino compulsivo como Buchilai, un torturador, un sádico, cuyo nombre todavía produce escalofríos. Y además tuvo, desdichadamente, mucho mejor suerte que Petán. Muy buena suerte.

20/5/22

El monstruo en su madriguera (1)

Pedro Conde Sturla

20 mayo, 2022

Félix Bernardino al frente de los Jinetes del Este desfilando por la calle Arzobispo Noel, 1959. Foto AGN

La bestia no lo sabía entonces ni tenía porque saberlo, pero la venganza de los Bernardino terminaría costándole finalmente la vida. Había permitido o propiciado la muerte de Octavio de la Maza para complacer a la familia Bernardino y había tenido la cachaza de darle formalmente el pésame a la familia De la Maza. Dicen que llamó a Antonio, hermano de Octavio, para expresarle sus condolencias y hacerlas extensivas a todos sus deudos. Para afrentarlo más bien, escarnecerlo, mofarse de su dolor y desafiarlo impunemente. La bestia estaba acostumbraba a humillar e injuriar a sus súbditos sin temer a las consecuencias, pero esta vez habría consecuencias. Esta vez la bestia se había extralimitado. La bestia había firmado, sin saberlo, su sentencia de muerte.

13/5/22

La venganza de los Bernardino (3 de 3)

Pedro Conde Sturla

13 mayo, 2022

El asesinato de Murphy permitió a los servicios de seguridad del imperio establecer al poco tiempo una conexión con el rapto de Galíndez y empezar a atar cabos. Muy pronto —siguiendo el rastro de sangre— comenzarían los investigadores a relacionar con el mismo caso las demás muertes y procederían a armar el rompecabezas y a señalar al culpable con nombres y apellidos y se complicó mucho más la situación. La bestia quedó envuelta en su propia telaraña.

7/5/22

UN MONSTRUO LLAMADO BERNARDINO (1-8)

Pedro Conde Sturla

 

Índice 

Un monstruo llamado Bernardino

Bernardino y Bernardina (1).              

Bernardino y Bernardina (2).                                                 

El otro Bernardino.                                                           

La venganza de los Bernardino (1).              

La venganza de los Bernardino (2) 

La venganza de los Bernardino (3 de 3)

El monstruo en su madriguera (1)

El monstruo en su madriguera (2 de 2)

Felix W. Bernardino y su hermana Minerva


Un monstruo llamado Bernardino

Pedro Conde Sturla

25 marzo, 2022

Al inicio de su fatídico gobierno, en la fatídica década de 1930, la bestia incorporó a su servicio a uno de los personajes más oscuros de la muy oscura era gloriosa, alguien que se destacó por su oscuridad entre los muchos tipejos oscuros del régimen tenebroso. No era un simple sicario, un verdugo, un torturador, un asesino vesánico, era un hombre instruido, tan malo como instruido, y respondía al nombre de Felix W. Bernardino. Orgullosamente Félix Wenceslao Bernardino Evangelista. Todo un Evangelista. Además le decían Buchilai, alias Buchilai o Buchilay.

La venganza de los Bernardino (2)

Pedro Conde Sturla

6 mayo, 2022

Galíndez y Gloria Estebanía Viera, la mujer que lo sedujo

Galíndez nunca vio venir el terrible golpe que le deparaba el destino, o mejor dicho la bestia. El 12 de marzo de 1956 desapareció de la faz de la tierra. Una hermosa mujer lo engatusó, le tendió una trampa en su propio apartamento de Manhattan. El apartamento donde lo drogaron y de donde lo llevaron al aeropuerto. El aeropuerto donde lo esperaba un avión que lo trajo drogado a Montecristi, haciendo escala en Miami. El avión que pilotaba el joven Gerald Murphy. El avión en que también viajaba el médico Miguel Rivera, el médico que drogó a Galíndez y lo mantuvo drogado durante el vuelo. El vuelo en que además venía el inefable Felix W. Bernardino.