Seguidores

21/12/24

Encuentros y desencuentros de la bestia y el bestezuelo

Pedro Conde Sturla



A fines de la década de 1940 Ramfis Trujillo contrajo matrimonio con una joven divorciada llamada Octavia Ricart, a la que apodaban Tantana. En ese tiempo tendría dieciocho años y ella diecinueve. Era una muchacha agraciada, era de buena familia, como se decía entonces de la gente que no era pobre, y se decía también que era inteligente… Casarse con Ramfis no era precisamente un indicativo de inteligencia, aunque si de conveniencia, sobre todo después de haber convivido con él un par de años y haberle dado dos hijos. Ramfis contrajo matrimonio con Tantana. Ella contrajo a Ramfis. Igual se contrae un virus o una sífilis, una enfermedad incurable. Eso era Ramfis, una enfermedad incurable.

7/12/24

Educación y hazañas del bestezuelo

Pedro Conde Sturla

7 diciembre, 2024

La educación escolar de Ramfis Trujillo no fue mejor que la forma en que lo criaron, la de un niño mimado y endiosado al que nunca enseñaron ni obligaron a estudiar o asumir ningún tipo de responsabilidad. Fue una educación irregular, carente de método y consistencia. Alguna vez le asignaron tutores, asistió brevemente a escuelas privadas, donde dio grandes muestras de indisciplina, incluso estuvo brevemente en el Colegio Luis Muñoz Rivera, hasta que decidió que los maestros fueran a darle clases a domicilio. También el exiliado español José Almoina fue su profesor privado. De él recibiría clases una hora al día en el palacio de gobierno. Se graduaría después con notas brillantes y le sería conferido graciosamente el título de bachiller. Luego ingresaría a la universidad… De sus medalaganarios e informales años de estudios y su breve y también informal estadía en la universidad obtendría un título en docta ignorancia. Se convirtió en un perfecto analfabeto funcional.